viernes, 4 de febrero de 2011

Javi contra Iago Leirós


Cuarta y última partida del duelo con Laroca, poca chicha...

5 comentarios:

  1. Al principio se me va la olla con Dc7

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  2. Puede ser que la poca chicha sea relativa, no es que no haya donde liarse sino mas bien que las alternativas son de un valor parecido, por eso lo de la poca chicha, si se compara con la partida de Pepe todo tiene poca chicha...

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  3. Desde luego que no quiero comparar partidas, independientemente de la chicha de ambas, la de Doval es interesantísima y un placer analizarla.

    Referido la relatividad de la chicha, creo que toda partida tiene chicha, ya que existen jugadores mal llamados "imaginativos" (cabrones diría yo :)) que pueden sacar agua de las piedras convirtiendo una partida sosa en un torbellino (quien tuviera esa habilidad...). Todo esto lo digo con un 99% de seguridad (debe haber partidas que ni tu tía).

    Respecto a la mi partida, creo que lo más interesante (quitando mis y sus errores de bulto) es el análisis de planteamiento de apertura y un momento antes de dejarse la torre en la que había un plan con c5 que le daba vidilla (ley de la máxima resistencia). A nivel de táctica el momento clave es cuando juego Cce5 que, de las buenas, es la peor (Cd4 o e4 deben cuasi fulminar).

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  4. Es que parece , a veces, que no nos cansamos de inventar la pólvora o de descubrir América... Por qué nos gusta el ajedrez?pues por sus ilimitadas (o cuasiilimitadas) posibilidades y porque siempre (casi)hay recursos donde no los parece (de hay la belleza de algunos estudios, por ejemplo)

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  5. Ahondando en eso de jugadores "imaginativos", se hace no se nace y como ejemplo te voy a hablar ( y seguramente conoces el caso) de Kotov. En su libro más famoso "piense como un gran maestro" (curiosamente fue el primero en escribir de su trilogía ...como un maestro y el segundo en editarse en España) habla al principio de como creo su método de trabajo y cuando decidió cambiar su forma de trabajar en ajedrez. El momento clave fue un torneo jugado en Moscú en el que se vio sorprendido por jugadas que no entraban en su mente (incluso planes) y pone como ejemplo una partida suya contra Panov en la que pierde miserablemente en una posición que creía muy buena para él (la partida búscala, porque supongo que tienes el libro), él mismo comenta que hasta ahí se le conocía como un jugador seco y posicional, pero a partir de ese momento pasó a ser todo o contrario y se le criticaba por ser demasiado agresivo e imaginativo (como culmen véase su sacrificio de Dama en el troneo de Candidatos de 1953 (Ajedrez de torneo de Bronstein hace unos comentarios muy literarios en esta partida, también creo que hay ahora un libro de Najdorf sobre el mismo torneo).
    Concluyendo, se puede ser más imaginativo, sólo hay que planteárselo e intentar en cada partida buscar la respuesta más creativa (supongo que haciendo estudios artísticos y viendo partidas de Tal también se te pegará algo)

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