Entrenamiento: Táctica 1

[Lo que viene ahora fue parte de un intento por crear un estudio del ajedrez vía documentos de descarga, ahora ya no sigo con esto pero sí sigo intentando dar respuestas  y consejos. Pásate por las últimas entradas y verás lo que hago ahora, gracias. Escribo esto aquí porque sé que mucha gente entra a través de "entrenamiento en ajedrez", ahora podéis seguir leyendo lo que puse en su día]

Como este es el primer artículo quiero aclarar un par de asuntos antes de entrar en materia. El material que se va a presentar en estos primeros días va a ser bastante básico, la idea es no dejarme nada atrás y repasar todo lo que debería formar parte de mi base ajedrecística, también voy a ver los distintos temas desde una perspectiva filosófica (por llamarle de alguna forma) tratando de explicar cada área de estudio de manera abstracta . Los ejemplos irán en bases de datos que o bien os mandaré por correo o habrá un enlace desde el cual podréis descargarlas.Nada más, espero que no os resulte muy pesado (estaba muy hablador)

Esta es la sección de táctica y quizá sea menester definir (a mi manera) lo que es la táctica.

La táctica es el acto en sí de mover, es decir, es el movimiento de las piezas. En realidad, controlar la táctica es controlar que pueden hacer las piezas de ajedrez. Suele relacionarse con como ganar (material o dar mate, básicamente) pero esto no deja de ser una consecuencia de saber que hacen las piezas y entender sus capacidades.

En comparación con la estrategia (que ya definiremos más adelante) la táctica es el cómo y la estrategia el qué. Evidentemente, hay otras formas de definir la táctica pero esta me parece que resalta su parte dinámica. De hecho todos los motivos tácticos que vamos a ver estos días tienen su fundamento en la forma en que las piezas se mueven (y relacionadas con las reglas del juego).

Voy a dar por sentado que conocéis, de sobra, cómo se mueven las piezas. Aún así, voy a teorizar un poco más. Podemos entender que haya ciertas piezas que sólo tengan un número limitado de temas tácticos. Las piezas de corto alcance (Rey, caballo y peón), por ejemplo, son incapaces de hacer una clavada; el rey es imposible que esté clavado (esto es consecuencia de la normas),etc. También es posible que una pieza tenga predilección por algún tema , por ejemplo, la dama y el caballo son especialmente prolíficos en el ataque doble, sobre todo, el caballo que es casi lo único que sabe hacer (y que bien , por cierto). Sé que no estoy entrando en lo que se suponía iba a ser este artículo, pero me apetecía tener esta pequeña reflexión.

Antes de empezar con los motivos tácticos, quisiera decir que era posible otra forma de enfocarlo y en vez de hablar tipos de táctica, hablar pieza a pieza (o combinaciones de piezas, que sí se hará).

El primer tema táctico que voy a mencionar es el más básico, se trata de la pieza atacada. Algunos dirán, “me voy, esto ya lo controlo” (Favio si estas ahí no te vayas). Recuerdo a los lectores que el fundamento de estos cursos es mi entrenamiento. No es que yo me deje piezas frecuentemente (en lentas no me las suelo dejar, pero con ritmos más cortos...)o eso creía, el detalle es que recientemente en dos partidas rápidas me dejé una pieza en una y me hizo pensar en que quizá en mi subconsciente no está totalmente arraigado el evitar estos errores tan simples.

Uno de los motivos más habituales es, obviamente, la falta de concentración, el rival hace un movimiento que creemos inocuo y resulta que nos están amenazando una pieza, recuerdo un caso muy conocido de Petrosian contra Bronstein en el que el primero tenía una ventaja muy grande, esto seguramente hizo que se relajase y acabó dejándose una dama (Javi, ya ves, hasta los más grandes se dejan su dama) sin estar apurado, ni nada por el estilo. Seguramente, la falta de concentración sea la causa más común (si no única) del dejarse las piezas en “prise”. Creo que también, en algunos casos, hay una falta de visión del tablero. ¿Cuántas veces, en rápidas, hemos puesto una pieza en una casilla controlada a distancia por una dama , un alfil o una torre? y ¿en cuántas ocasiones hemos movido una pieza justo donde un caballo nos da un doble (ya hablaremos de esta figura táctica),que muchas veces es también jaque, para nuestro cabreo? Hay algún libro, para adultos que quieren mejorar su juego, que insisten en el tema de hacer estudios exhaustivos del movimiento de las piezas, en especial el caballo, que es el menos evidente en sus movimientos. Yo creo que la mejor manera de familiarizarse con las piezas es estudiar finales, ya que ahí los movimientos son más claros y se aprecia mejor la capacidad real de cada pieza.

Esto es muy básico y nadie se pasa el tiempo haciendo problemas de “me como pieza en una”, aún así, creo que no está de más el buscar una razón a estos fallos ocasionales. Creo que un motivo está en hacer caso omiso a las jugadas del rival y sólo centrarnos en nuestros movimientos, por eso hay que buscar un balance y, por lo menos, comprobar donde están las piezas de mi rival. Dicho esto, expliquemos por qué debemos hacerlo. Muchas veces, tenemos una percepción del tablero que no es la real, o sea, creemos que hay ciertas relaciones que son “eternas” y una pieza que estaba clavada (absoluta) va a seguir así, o cierta amenaza que estaba defendida lo sigue estando (no es la primera vez que se mueve o cambia una pieza que realiza una función defensiva importante con el consiguiente mate o pérdida material).Esto es lo que se llama imagen residual, que no deja de ser un recuerdo de cómo estaba el tablero que interfiere con la situación real en el tablero. Kotov dice que la causa última de esto es no estar concentrado, aún así, creo que es necesario crear alguna rutina que nos haga menos propensos a este tipo de tácticas.

Yo creo que un buen método para evitarse algunos de estos “detalles” tácticos es el no dar opción a que pasen. Por ejemplo, una idea muy buena (de hecho una regla que suele tener una vigencia muy amplia) es poner una torre en la misma columna que la dama rival con piezas(o peones) de por medio, ya que provoca cierta presión y limita las acciones rivales de ruptura en esa zona. Como es evidente, también debe ser buena idea el evitar tener piezas importantes atacadas vía “rayos x”, otro truco importante es el de no dejar piezas sueltas (sin protección) ya que , a menudo, son la base para ataques dobles . Yo en el final, si mi rival tiene un caballo, intento tener las piezas en colores distintos para evitarme dobles indeseables de caballo (me dejé uno el año pasado contra el Pablo Casas en el campus en un final de alfil vs caballo y con un peón de más). Si uno tiene eso metido en mente, es más complicado dejarse ese tipo de tácticas. Sé que algunos ya tenéis vuestro propio sistema y no voy a entrar a discutir cuál es mejor, sólo digo que hay que tener una forma de evitarse estos malos tragos.

También, podemos repasar las tácticas más básicas (a un par de jugadas vista). Así, al tenerlas más frescas, será más difícil caer en ellas (yo hago treinta al día, pero no deben ser suficientes).

Empecemos pues con las distintas figuras tácticas:

El ataque doble (o simplemente doble) es, quizá, el más fácil que se produzca en una partida, ya que todas las piezas (salvo un peón en las columnas de torre o un alfil en la esquina de la gran diagonal) están en una posición para poder darlo. Es, sin duda, un arma poderosa y uno de las más estudiadas. Como ya se dijo, el caballo es a quien más se le asocia esta figura y entre primerizos suele tener un gran valor ya que es quizá el que tiene un movimiento más “raro”, quizá la única pieza que puede rivalizar con el equino sea su majestad la dama ya que, debido a su gran movilidad, tiene una facilidad muy alta para atacar varios puntos. Es muy importante controlar este recurso y la única forma efectiva que conozco de controlarlo es por medio de la repetición de ejercicios sobre el tema. Como ya mencioné una de las mejores formas de evitar caer en una figura táctica sea precisamente el no dar pie a ello, ya comenté mi “truco” para evitar dobles de caballo en los finales, el mismo sirve contra el alfil, e incluso se puede llevar al extremo si ponemos las piezas en el color contrario al que domina dicha pieza. También mencioné lo de la pieza suelta, que es una de las mayores presas de los dobles y, muy a menudo, de la dama. Como todas la tácticas básicas su importancia es mayor de la que se podía suponer, no vale decir,”¿ un doble?¡eso es muy fácil...!” y si echamos cuentas, resulta que es una de las causas más habituales en nuestras derrotas ( yo creo que la intermedia es la que más daño me ha hecho, aunque tengo varios dobles dolorosos), por eso, no por simple deja de ser importante, estoy convencido de que gran parte de mis errores provienen de errores tácticos relativamente fáciles de ver y eso sólo confirma que su estudio debe ser prioritario (en lo referente a táctica), de nada me sirve conocer el árbol de análisis y las jugadas candidatas, si luego no soy capaz de encontrar este tipo de tácticas rápidamente.

En las bases(que ya os pasaré) tenéis material sobre todas las tácticas básicas , incluso, hay alguna que explica en profundidad cada una ellas( en esta http://www.mediafire.com/?bbcyrp7x274npxc ).

Otra táctica básica es la clavada, esta, como es evidente, se basa en piezas de largo alcance que paralizan la acción de otra. Es importante y más habitual la de alfil, ya que hay muchas aperturas que basan su juego en ella ( o empiezan haciendo una pronto), sobre todo la de alfil al caballo con dama detrás (que como ya sabemos no es letal, como en el Legal). Es un gran incordio tener una pieza clavada ya que la pieza clavada pasa a ser casi como inexistente (en el caso de la clavada absoluta sin el casi) a la hora de defender (salvo por el hecho de “tapar” donde está), una de las clásicas consecuencias es el verse atacada la pieza clavada y no tener más remedio que dejarse capturar. En rápidas es uno de los principales motivos de ilegal, lo cual demuestra que tiene su aquel (nos olvidamos de ella). Hablaré de ella más adelante, pero en relación a la apertura y cuando es importante evitarla. En la base de arriba hay una descripción pormenorizada de la clavada por lo que no voy a entra en detalles. Quizá sólo mencionar su prima (skewer en inglés) que yo llamaré clavada inversa, que es cuando una pieza atacada tiene detrás otra de menor valor y debe dejar que se la coman , el rey es el más habitual y suele ser un truco recurrente en finales de torre con peones muy avanzados (ya lo veremos en su momento).

Otro táctica que tiene cierta similitud, y bastante más peligrosa, es la descubierta, que tiene también un aire a la clavada inversa. Es, quizá, la más devastadora de las tácticas básicas (el molino es su paradigma ideal) ya que permite atacar de manera simultánea con dos piezas, con todo lo que ello supone. La descubierta más mortífera es la que hace doble jaque ya que obliga al rey a moverse, sí o sí, dando lugar a varios mates ahogados( y combinaciones de mate a secas), la más común debe ser la provocada por un peón al avanzar (o capturar), y suele traer la captura de material ya que el peón suele atacar también una pieza enemiga. Es una de las más difíciles de prever ya que es muy amplio el abanico de posibilidades que se le abren a la pieza que descubre (véase la partida Torre-Lasker Moscú 1925).Como siempre , el mejor modo de tenerla controlada es el hacer ejercicios hasta que se vean al toque (para variar).

Hasta aquí llega el capítulo de hoy, se que ha sido muy simple, pero ya comenté que quería comenzar desde abajo. Os recomendaría que le echaseis un ojo a la base del enlace, pero no es necesario (supongo que tendréis ya las vuestras, aunque esta explica, bastante bien, las distintas tácticas simples). Sé que me repito, pero estoy convencido de que viene bien pegar un repaso, a este tipo de temas básicos, de vez en cuando.

El miércoles seguiremos con el primer capítulo de estrategia. Irá en la misma línea que este (va a ser muy básico) pero es la del curso (y de mi entrenamiento).