Propongo un ejercicio bastante tonto (no es de extrañar viniendo de mi). Consiste en contar las piezas que hay en una posición (ya os lo dije: tonto) . A mi me pasa bastante que cuando estoy viendo una partida en directo (y de modo presencial) que no cuento lo que hay en el tablero, normalmente no pasa nada raro (no suele haber grandes diferencias en material) pero en torneos con niños pequeños era un espectáculo (ahí si que pasa de todo).
Obviamente, lo deberíamos hacer de forma intensiva, tener una sucesión de posiciones y hacer cada posición en segundos, algún beneficio seguro que tiene, más allá, incluso, del saber cuantas piezas hay en el tablero.Además, aunque uno cuente las piezas bien, siempre se puedes ser más rápido...
Ahí os lo dejo.
Por si puede valer o aportar algo (creo que tiene algo que ver), me acuerdo en una conferencia que si vemos una posición normal(o posible, o cómo se le quiera llamar) somos capaces de recordar la posición de todas las piezas y su número, pero si nos ponen una posición imposible o "rara", no seremos capaces de reproducir la posición. Lo que propones junto con esto quizás si pueda ser interesante y es cómo nuestro cerebro tiene esquemas prefijados y en algunas posiciones (sobretodo en apuros aunque también con tiempo) obviamos jugadas con piezas porque tenemos ya un esquema en la cabeza. Esto suele pasar cuando cambiamos de aperturas, ya que tenemos demasiado interiorizados planes o estrategias.
ResponderEliminarTambién nos pasa que sólo vemos cachos del tablero, pasa mucho en problemas y tácticas recurrentes;por ejemplo el sacrificio Axh7 que a veces se trunca por una pieza en el flanco de dama ( véase Álvaro vs Aarón Ferreira blog 16 de febrero y como un Dc2 tira al traste la combinación, que no se produjo en partida)
ResponderEliminarYo creo que con este ejercicio conseguimos un mejor control del tablero y eso no puede ser malo.